Los adolescentes de medio mundo tienen un nuevo ídolo: el cantante Justin Bieber. A sus 16 años, este joven con cara de niño ha conquistado ya las listas de los discos más buscados y este año se embarcará en su primera gira de conciertos, llamada «My World Tour».
Justin nació en Ontario, Canadá, y desde bien pequeño demostró que lo suyo era la música. A los 12 años participó en un concurso de canto y su madre quedó tan satisfecha que comenzó a subir vídeos de su pequeño en YouTube. Un productor le vio, le introdujo en el «sistema» y su fama creció como la espuma.
A partir de entonces, los «paparazzi» siguen a este chico allá por donde va, las fans se agolpan para verle en los «photocalls», Disney le hace entrevistas, acapara portadas de revistas para adolescentes y se codea con artistas como Katy Perry o la actriz Lindsay Lohan. Y más aún: se rumorea que Kendall Jenner, la hermana pequeña de Kim Kardashian, podría ser algo más que una amiga. Por si esto fuera poco, Justien tiene nada más y nada menos que 1.645.104 seguidores en Twitter (y subiendo), canal propio en YouTube, y una agenda de lo más completa en su MySpace. Definitivamente, es el naciemiento de una nueva «pop star» adolescente.
